Vacaciones con niños pequeños: Viajar con bebes destinos.



Vacaciones con niños pequeños: Viajar con bebes destinos.


¿Se puede viajar con bebés? Viajar con bebés es un reto, pues hay que tener en cuenta muchos factores para no correr riesgos innecesarios en la seguridad, en la alimentación... Estas son las pautas importantes que hay que seguir.




Elegir un destino adecuado. En sus primeros años de vida, la prioridad al elegir un destino turístico o un viaje debe ser el niño. Hay lugares que por su especial peligrosidad no aconsejan una visita con niños. También influye el nivel de asistencia sanitaria que haya. Infórmate siempre antes de estos aspectos y lleva contigo los documentos sanitarios del bebé.



Prepara un botiquín de viaje. Siempre que salgas de viaje con niños prepara lo siguiente: crema para el sol, pinzas, tijeras, termómetro, suero fisiológico, material para curas (gasas, tiritas, vendas...), repelente de insectos, pomada para las picaduras de insectos, antiséptico como la povidona yodada...



Y los siguientes medicamentos: antitérmicos, analgésicos, antihistamínico oral (por si alguna picadura se complica), crema con corticoides (para quemaduras y picaduras) y crema antibiótica (por si alguna herida se infecta).



Elige un medio de transporte pensando en el bebé. Siempre que puedas, escoge un medio de transporte que resulte cómodo para el niño.



Elegir un momento óptimo. En la medida de lo posible, lo mejor es viajar en periodos en que el niño pueda pasar un buen rato durmiendo; por ejemplo, la siesta o de madrugada.



Cuidar sus oídos en el avión. Los bebés pueden sentirse muy molestos si viajan en avión por la presión en los oídos. Por eso se recomienda que en el aterrizaje y en el despegue realicen movimientos de succión, ya sea en un chupete, en el pecho de su madre o en un biberón.



No hay edad mínima para volar. Si el niño está sano, no hay ningún impedimento de salud que le impida volar desde sus primeros días de vida. Ahora bien, algunas compañías aéreas piden que el recién nacido tenga, al menos, una semana para permitirle embarcar en sus aviones.



En vuelos largos. Si el vuelo tiene mucha duración, algunas compañías ofrecen cunitas de vuelo para que el pequeño pueda descansar más a gusto y no sobre el regazo de sus padres.



La comida a bordo. Aunque haya restricciones para embarcar con líquidos en el avión, la comida del bebé se libra de esta norma. Puede pasarse el control de seguridad del aeropuerto y subir al avión con todo lo necesario para que el bebé se alimente durante el vuelo.



Hidratarse bien. Todos los niños que emprenden un viaje deben hidratarse muy bien, tomando, preferentemente, agua o zumos naturales. Pero en especial es muy importante asegurar la hidratación del niño que viaja en avión, pues al volar el organismo tiende a deshidratarse



A la playa, con precauciones. El bebé no debería visitar la playa (ni siquiera permaneciendo bajo la sombrilla) hasta que no sea mayor de 6 meses. Esto es así porque su piel no puede defenderse correctamente de las radiaciones solares y no está indicado poner crema solar antes del primer semestre de vida.



Baños en el mar. Los bebés pueden bañarse en el mar sin ningún problema, siempre que estén bajo la supervisión paterna. No obstante, hay que procurar que están convenientemente protegidos del sol con crema, gorro y camiseta blanca.



De picnic, pero sin riesgos. Cuando se está de viaje hay que proteger del calor los alimentos del bebé. Hay que desechar el biberón si no se lo acaba, pues proliferan las bacterias. Lo ideal es que el bebé tome siempre comida recién cocinada o perfectamente conservada en un termo. No son aconsejables los platos con huevo para un picnic.



Descansos en mitad del viaje. Si el viaje se realiza en automóvil, lo mejor es parar cada 200 km, como máximo, o tras dos horas de camino, para sacar al bebé. Es recomendable cambiarlo de postura; por ejemplo, tumbarlo un rato.



Ropa cómoda y holgada. La ropa elegida para los viajes ha de ser cómoda y holgada, sin ningún adorno ni accesorio que el bebé se pueda clavar. Igualmente, los zapatitos deben ser transpirables, aunque otra opción es quitárselos durante el trayecto.



Entretenimiento. Si no van durmiendo, los bebés pueden impacientarse enseguida durante el viaje. Para evitar que se aburran, es bueno colocar móviles de formas y colores a su altura o proporcionarles objetos con los que puedan entretenerse un rato. ©JmWests/Flicker



Siempre bien seguro. Durante los viajes en coche, el bebé siempre debe ir con los sistemas de retención infantil adecuados a su edad y a su peso. Aunque se trate de un trayecto corto, debe usarse siempre la silla de auto. Si es verano, conviene instalar parasoles en las ventanas y comprobar que la tapicería y los enganches de su silla no están demasiado calientes.



Si no para de llorar. Aunque el niño no deje de llorar en el coche, no se puede quedar fuera de la sillita si el automóvil está en marcha. Se puede comprobar si está mojado, si tiene hambre o sed. Si se le da algo de comer, hay que vigilar que no sea muy pequeño como para provocarle un atragantamiento.



Nunca dejar solo al bebé en el coche. Jamás hay que dejar a un bebé solo en el coche. Especialmente en verano, el pequeño puede sufrir un golpe de calor (hipertermia) o una deshidratación que conlleven, incluso, la muerte.



Prevenir los mareos. Hay bebés más propensos que otros a marearse. Para prevenirlo, además de no viajar con el estómago totalmente lleno y buscar distracciones para ellos, se puede recurrir a algún fármaco. Tiene que ser el pediatra el que prescriba el adecuado según las características del bebé.



Planificación en los viajes internacionales. Si se va a viajar con bebés a un país extranjero, hay que planificarlo todo con más antelación. Al menos un mes y medio antes de la salida, habría que consultar con el pediatra por si hay alguna vacuna necesaria que hay que administrarle al niño antes de salir (las vacunas tardan unos 15-20 días en hacer efecto).



Vacunas especiales. En algunos países se exige que el bebé cuente con determinadas vacunas. Es el caso de la fiebre tifoidea, la fiebre amarilla, el sarampión o la hepatitis A, pero estas no pertenecen al calendario vacunal de todos los países y no se pueden poner en cualquier momento. Por ejemplo, la hepatitis A se pone a partir del año y la fiebre amarilla, desde los nueve meses.



Cuidado con las aguas. Muchos turistas sufren la denominada diarrea del viajero, que puede afectar también al bebé. Si el niño sigue con la lactancia materna, continuar con ella es la mejor medida de protección frente a la diarrea del viajero.



Condiciones del agua. Si en otros países el bebé debe utilizar agua para beber o para su alimentación, esta debe ser embotellada o hervida durante 15 minutos. No se aconseja que tome helados ni cubitos de hielo y los dientes se lavarán también con el agua embotellada o hervida.


Vacaciones con niños pequeños: Viajar con bebes destinos. Vacaciones con niños pequeños: Viajar con bebes destinos. Reviewed by can on 16:01 Rating: 5

No hay comentarios